Los medios de comunicación españoles no se suelen caracterizar por su rigurosidad a la hora de tratar informaciones científicas y hoy mismo tenemos un buen ejemplo de ello en el periódico El Mundo.
Podemos leer sobre el terremoto de Chile:
“La Naturaleza ha vuelto amostrar este fin de semana su perfil más devastador. En la madrugada del sábado, un terremoto de 8.8 grados en la escala de Richter –una intensidad 50 veces mayor que la del registrado en Haití– sacudió la zona centro-sur de Chile”
Dos errores en la hora de comparar este terremoto con el de Haití:
En primer lugar, se está confundiendo magnitud e intensidad de un terremoto, cuando no son lo mismo. La magnitud mide la energía liberada por un terremoto y se obtiene a partir de los datos de los sismógrafos (por ejemplo, la escala de Richter). Mientras que la intensidad, mide los efectos que ha tenido un terremoto en un determinado lugar (por ejemplo, la escala Mercali).
Asumiendo que las comparación entre los terremotos de Chile y Haití no está referida a su intensidad sino a su magnitud, nos encontramos con otro error en la información. Si el terremoto de Haití tuvo una magnitud de 7 en la escala Richter, y el de Chile de 8,8, la energía liberada por este último ha sido unas 500 veces superior, y no de 50 c0mo indica el texto.