Esperanza Aguirre se empeña en intentar cambiar la realidad con sus palabras, aunque ello suponga entrar en contradicción con ella misma. Hoy hay asegurado que la fusión de Caja Madrid y Bancaja fue un “matrimonio a punta de pistola”, impuesto por el Gobierno de Zapatero y el Banco de España, lo que contrasta con sus declaraciones cuando se produjo esa fusión: “una noticia muy positiva para el sistema financiero español y especialmente para la Comunidad de Madrid”. Es mas, es capaz de decir que ella era partidaria de la fusión con La Caixa, cuando una de las razones de su optimismo por la fusión con Bancaja era precisamente el tener en Madrid una caja de ahorros mayor que la entidad catalana: “Tenemos que sentirnos orgullosos de tener la entidad financiera más grande de España, por delante de La Caixa”.
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